La realidad virtual se puede utilizar para jugar a videojuegos, ver películas, trabajar, y por supuesto… hacer deporte.
Hoy os traigo la review del Eleven Table Tennis, y os adelanto ya, que es de lo mejorcito que veréis en cuanto a videojuegos deportivos. ¿No me creéis? Seguid leyendo:
Raqueta, pelota, mesa y rival… parece simple, ¿no?
Tanto si eres fan del tenis de mesa (ping pong), como si no, te invito a que le des una oportunidad al Eleven. El Eleven Table Tennis es uno de estos juegos que sobrepasan la categoría juego y se acercan mucho a la categoría «simulador». Te colocas el visor, entras en la sala de juego, lanzas la bola al aire dispuesto a sacar y la magia empieza.
Pronto te das cuenta de que este juego cuenta con unas físicas asombrosas, la bola se comporta tal y como lo haría en la realidad. Tanto en velocidad, bote, fuerza… Y por supuesto, y quizás lo más complicado de lograr, el efecto.
Para quienes no lo sepan, el efecto es una cualidad que en tenis de mesa se le consigue dar a la pelota en función de cómo haya sido tu golpeo. La bola no se comportará igual si la golpeas plana, si la rozas por arriba, por abajo o de forma lateral. El efecto influye en casi todos los deportes de raqueta, pero en tenis de mesa es una parte fundamental, ya que al ser tan pequeña la pelota, se le consiguen dar efectos endiablados.
Pues también este aspecto está maravillosamente bien conseguido en el Eleven, la pelota girará sobre si misma de una u otra forma según cómo la golpeo, exactamente como lo haría una pelota real.
Todo esto, en definitiva, logra un hiperrealismo asombroso, tras unos minutos de adaptación, tu cerebro apenas podrá distinguir si está jugando en real o en virtual.
El Eleven Table Tennis cuenta con modo de juego contra la máquina, modo entrenamiento y por su puesto, modo multijugador, en el que podrás jugar partidas amistosas o partidas de ranking.
Además, cada mes se realizan varios torneos, en los que incluso hay dinero en juego para los ganadores, y existe una comunidad muy grande creada alrededor.
Por último, como consejo, es altamente recomendable hacerse con un adaptador para el mando con forma de raqueta, lo cual hará que la experiencia y realismo sea completo. Así como dedicar unos minutos la primera vez a toquetear y modificar los ajustes de tu raqueta hasta que encuentres los que mejor te vayan.
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Si queréis divertiros, hacer ejercicio (sí, en el ping pong virtual, al igual que en el real, acabarás chorreando de sudor), y competir, tenéis que darle una oportunidad a esto. Os lo dice una persona que lleva casi 20 años jugando a tenis de mesa a nivel federado!
P.D- Parece broma pero no olvideis que la mesa no es real, mucha gente al terminar tiene la tentación de dejar la raqueta sobre la mesa y el mando cae al suelo. Que no os pase!!
