Una aventura misteriosa, sobrenatural y con acertijos bastante complejos.
Recuerdo con nostalgia, en la ya lejana época de los años 90, con un internet y unos videojuegos en su más tierna infancia, predominaba un género que gozó una popularidad que nunca volvería a tener. Esta era el género de aventuras gráficas. Esos videojuegos donde manejabas a un personaje dentro de una historia en la que debías resolver distintos puzles y acertijos para avanzar.
Salvando las distancias, la realidad virtual es un entorno propicio para que este tipo de juegos vuelvan a tener su protagonismo. En este medio, donde nosotros somos el protagonsita, podremos vivir cualquier historia de forma intensa.
Y toda esta introducción viene a cuento de presentar The Room VR. Un videojuego que podríamos ubicar situar cercano a este género de aventura gráfica en primera persona.
En The Room VR, seremos un detective en el Londres de 1908, que debe investigar una serie de misteriosas desapariciones. A medida que vamos avanzando, la trama se vuelve misteriosa, sobrenatural y bastante compleja. Realmente llega un punto en que por desgracia la trama debido a la complejidad pierde bastante interés y uno se centra más en la resolución de los puzles que en la historia en sí.
Los puzles, la parte principal de este juego, son bastante variopintos y originales, de una dificulta media/alta, en la que en algunos casos tendremos que devanarnos bastante los sesos para resolverlos.
Un punto negativo a mi parecer, es que el juego no te permite un movimiento libre en ningún momento, sino que solamente te puedes desplazar a unos puntos prefijados del escenario desde los cuales interactuar. De esta forma la experiencia por una parte se hace algo más sencilla, ya que en todo momento sabemos por qué puntos de la escena debemos buscar, pero por otra parte le quita muchísima inmersión a la plataforma de VR.
El apartado gráfico es correcto. Sin grandes paisajes ni escenarios que nos asombren, el juego cuida los detalles y todo en la escena se ve muy bien implementado.
La duración del juego depende mucho de lo hábil que seas para resolver los puzles (o del tiempo que le des antes de mirar en una guía), pero de media es un juego bastante corto que en unas 3 horas lo podemos finalizar.
Y tu, ¿eres bueno resolviendo acertijos? Ponte a prueba con The Room VR y déjanos en comentarios qué te ha parecido.